La tuberculosis es una enfermedad crónica, de desarrollo lento, que no suele manifestar síntomas aparentes.
La padecen los animales, tanto domésticos (vacas y cabras, principalmente) como silvestres. También se puede contagiar a las personas.
Las principales vías de contagio son la respiratoria y digestiva.
Pueden existir animales que tengan la enfermedad y la puedan contagiar a otros pero den resultado de diagnóstico negativo.
En Navarra, el 99,40% de las explotaciones de ganado bovino están libres de esta enfermedad. No obstante, la normativa europea obliga a la realización del saneamiento ganadero para localizar los posibles animales infectados que podrían convertirse un foco de contagio para otras ganaderías y para las personas.
La presencia de la enfermedad en las explotaciones conllevaría restricciones comerciales a los animales y a los productos, y es por ello por lo que desde el Gobierno de Navarra se quiere alertar e informar a los ganaderos, para que conozcan el modo de evitar la difusión de esta enfermedad.
En el artículo se da respuesta a todas las preguntas que pueden hacer los ganaderos sobre este tema.