El tomate (Solanum lycopersicum L.) es un cultivo hortícola muy importante en el mundo. La contribución del tomate en fresco y de sus productos derivados a la dieta es fundamental, al ser una importante fuente de compuestos bioactivos beneficiosos para la salud humana.
En el ámbito mundial se producen 180 millones de toneladas (datos FAO), de las que aproximadamente un 20% se destinan a diferentes procesos de transformación industrial.
La producción mundial de tomate de industria en la campaña 2018 ha sido de 34,32 millones de toneladas, un 9,2% menos que en 2017.
En general, se observa un descenso de producción en la mayoría de los principales países productores. Destaca en cifras negativas China con un 32% menos de producción y que ha perdido la segunda posición en el ranking mundial, lugar que ocupaba desde 2014 a 2017. Por el contrario, en California, que es el principal productor mundial de tomate para procesado, ha aumentado su producción un 16,6%, con 11,07 millones de toneladas en 2018 frente a 9,49 millones de toneladas en 2017.
California representa un 32,25% de la producción total. Le siguen en orden descendente Italia, con una producción de 4,65 millones de toneladas y China, con 3,8 millones de toneladas. Las siguientes posiciones están ocupadas por España (2,8 millones de toneladas), Brasil (1,4 millones de toneladas) y Turquía, con 1,3 millones de toneladas.
En este artículo se hace un balance general de la campaña y se analiza la evolución de la superficie de cultivo y rendimiento de tomate de industria en España y en sus principales zonas productoras, a la cabeza de las cuales se sitúa Extremadura, seguido de Andalucía y el Valle del Ebro, donde se incluye a Navarra. En esta última zona, la climatología de la campaña 2018 ha influido negativamente en los resultados de cosecha y en el comportamiento de las variedades.
Finalmente, se ofrecen los resultados obtenidos en la experimentación de INTIA con nuevas variedades comerciales. Fruto de esta experimentación en Navarra y de otros ensayos similares realizados en la Comunidad Autónoma de Aragón, al final del documento se ofrece una Recomendación a los agricultores del Valle del Ebro con las variedades más interesantes y mejor adaptadas a sus condiciones de cultivo.