El peral es el frutal que mayor superficie ocupa actualmente en los regadíos navarros, con más de 1.000 hectáreas de la variedad Conferencia. Las condiciones agroclimáticas de la Ribera Navarra, favorables para el cultivo de esta variedad, propician la obtención de frutos de muy buena calidad, lo que favorece su venta e impulsa anualmente el incremento de la superficie implantada.
Tradicionalmente, como en el resto de los frutales, la poda se realizaba con mano de obra especializada, que tenía conocimientos prácticos respecto a cómo realizarla de una forma razonada. Actualmente, el panorama ha cambiado y son muchas las explotaciones donde la poda se realiza con mano de obra contratada, que no reúne dichos conocimientos.
La poda mecanizada con discos simplifica ésta labor, reduce la dependencia de mano de obra no especializada y los costos del cultivo, manteniendo la calidad de la fruta obtenida.
Este artículo analiza las ventajas e inconvenientes de realizar poda mecánica o manual, sobre la base de los resultados obtenidos por INTIA entre los años 2015 y 2020.