Por los resultados productivos obtenidos, la campaña de 1999 se puede cifrar como la mejor de la década de los noventa. La media ha sido de 55,7 t/ha en las 3.372 hectáreas que se han cultivado en la Comunidad Foral de Navarra, lo que supone una producción total de 187.866 toneladas (el 40% para pelado entero, el 35% para otros usos y el 25% para concentrado).
Esta excelente campaña se ha producido, en parte, gracias a una climatología benévola para el cultivo, con unas temperaturas suaves y uniformes desde el principio que se mantuvieron sin grandes altibajos hasta finales de agosto, momento en el que se produjo un aumento generalizado de las mismas que en algunos casos provocó un agrupamiento de cosecha y sobremaduración, seguido (a principios de septiembre) de lluvias que agravaron el problema. El resultado fue que se perdió parte de la cosecha, en muchos casos por dejadez y falta de tratamientos preventivos del agricultor.