Un dato que siempre nos llama laatención cuando comparamo snuestros resultados de gestión con los de las redes francesas es la diferencia en los kilos de pienso que consume una cerda al año. Mientras que las cerdas de las explotaciones navarras no llegan a los 1.100 kilos, las cerdas francesas sobrepasan siempre los 1.250 kilos por cerda y año, es decir un 15% más. Este dato choca porque, como ya vimos en el número anterior de Navarra Agraria (nº 127, de julio-agosto de2001), la media de las explotaciones francesas de porcino obtiene mejores resultados que las nuestras.Dado que en realidad lo importante no son los kilos sino las kilocalorías consumidas, cabría esperar que los piensos utilizados en nuestra sexplotaciones fueran más energéticos. Aunque también podría ocurrir que nuestras cerdas no estuvieran bien alimentadas.