Lo más notorio desde el punto de vista climatológico en los secanos frescos de Navarra fueron las altas temperaturas durante el llenado del grano. En la Zona Media, el clima ha sido favorable a lo largo del ciclo, mientras que en la Ribera, de nuevo la sequía ha sido la nota predominante.
En cualquier caso las lluvias, aunque escasas, cayeron oportunamente. Y el cereal en general ha sabido administrar bien los limitados recursos de lluvia de los que ha dispuesto en esta campaña, para llegar hasta la maduración y ofrecer en general una cosecha de aceptable a buena, con la excepción habitual de los secanos áridos del Sur de Navarra, sometidos una vez más a la proverbial sequía.
En su conjunto, la campaña 2005-06 se ha cerrado provisionalmente con una cosecha de 755 mil toneladas de cereales en Navarra, un 3% inferior a la del año anterior.
También ha habido diferencias de calidad entre unas y otras zonas de Navarra debido a las altas temperaturas del final del ciclo.
