En este número se exponen los resultados de la experiencia llevada a cabo por el ITG Ganadero
en la que se han estudiado las posibilidades de producir cordero ecológico en Zonas de Montaña de Navarra.
El estudio se ha llevado a cabo en su Finca experimental de Remendía, en pleno Valle de Salazar. Ofrecemos un resumen de la experiencia y un documento más amplio que recoge con detalle los datos y resultados obtenidos, al que se puede acceder como anexo de esta misma página o a través de la página web del ITG Ganadero (www.itg-ganadero.com).
En 1988 el Gobierno de Navarra, mediante un acuerdo con la Junta del Valle Salazar, creó en Remendía un Centro Piloto de Explotación ganadera de la especie Ovina como instrumento de mejora y desarrollo de las explotaciones de este entorno.
En la última etapa, desde 1994 hasta el año 2000, esta finca se había centrado en optimizar un sistema de producción basado en un proceso reproductivo con una sola época de partos al año con invernada al aire libre.
A finales del siglo XX la sociedad en general muestra un incipiente interés por sistemas de producción que se integren en el entorno en que se desarrollan, provocando el menor impacto negativo posible y que a su vez produzcan alimentos percibidos como más saludables y cercanos a los tradicionales. En esa línea se empieza a hablar de productos etiquetados como "bio", "ecológicos", etc, algunos de los cuales responden a marcas certificadas y otros no.
Los ganaderos también reciben este mensaje desde la sociedad y desde las instancias administrativas. Eso se traduce en una evolución continúa de las condiciones legales bajo las que se desarrolla su actividad y de los requisitos que marca la administración a la hora de regularla y apoyarla por medio de subvenciones y otras medidas de apoyo.
No obstante, a la hora de aplicar los condicionantes, el sector echaba de menos un conocimiento más exacto de las consecuencias reales que podía suponer para una explotación el cambio hacia sistemas de producción ecológica. No había resultados aplicables a Navarra, ni experiencias de explotaciones ganaderas cercanas con las que establecer una comparación eficaz. Por eso el ITG Ganadero se planteó en el año 2000 establecer un modelo de producción ecológica en sus Fincas experimentales, con el fin de poder ofrecer datos contrastados a los productores de ovino.
En el año 2001, ITG Ganadero inicia el paso hacia este tipo de producción, inscribiendo oficialmente toda la superficie agraria de la Finca de Remendía en agricultura ecológica. Tras un periodo de transición, en el año 2003, se obtiene la primera Licencia como operador ecológico.
En estos años, ha quedado patente que es posible producir corderos en sistema ecológico incluso en condiciones tan difíciles como las que existen en los valles pirenaicos navarros. Sin embargo, ese tipo de producción pone unas limitaciones y conlleva un aumento de costes que es necesario trasladar al precio del cordero que sale al mercado y esto no