La ganadería en Navarra es un sector competitivo, dinámico y generador de riqueza, muy arraigado en el territorio, que desarrolla su actividad en el entorno rural. Se reparte en varios subsectores ganaderos de diferentes especies y producciones (vacuno, ovino, porcino, avícola, conejo…) que tienen iniciativa y dinámicas propias, desarrollándose en cada zona el tipo de ganadería que más se adapta al territorio y a las demandas del mercado. Como cualquier actividad productiva humana, más si está en contacto con seres vivos, la ganadería conlleva unos riesgos de ahí la necesidad de regular las condiciones medioambientales, sanitarias y de bienestar animal.
En los últimos años se han publicado varias normas a nivel nacional que regulan la ordenación zootécnica, sanitaria y de bienestar animal de las explotaciones, e inciden en la protección medioambiental.
La adaptación de estas normas a la singularidad de las condiciones de la ganadería en la Comunidad Foral, así como la necesidad de regular las especies no contempladas en la normativa nacional, ha llevado al Gobierno de Navarra a aprobar el Decreto Foral 31/2019, que complementa la normativa nacional existente.
Se busca conseguir tres objetivos: disminuir riesgos epidemiológicos tanto para las explotaciones como para las personas; mejorar y simplificar la tramitación administrativa de explotaciones y fomentar explotaciones sostenibles y viables en el tiempo con una dimensión que permita su integración con el medio.
En el eje de la regulación está la Bioseguridad de las explotaciones ganaderas, para evitar la transmisión de enfermedades infecciosas que acarrearían daños graves en el ganado con implicaciones negativas también para el comercio y el movimiento de animales
En este artículo se resumen los aspectos más importantes de la normativa.